martes, 2 de junio de 2009

Se reclama vieja política y con barbarismos niega haber agredido a periodistas sullaneros

Gregoria Zapata Gallegos, gerenta de Servicios Públicos Locales de la Municipalidad de Sullana, se presentó en una radio local para defenderse de las acusaciones de agresión realizada por tres periodistas locales, quienes fueron increpados por la conocida funcionaria cuando cumplían con su trabajo de prensa.

Calificándolos de "sujetos" y desconociéndoles su calidad de profesionales de la comunicación, Zapata expresó no conocer a Edgar Aguirre, Jahel Yovera y Víctor Arrunátegui, a quienes se les acercó para exigirles que no hagan un mal uso de lo percibido y visto en el acto público que se realizó en el sector de Loma de Teodomiro.

Irrogándose una facultad que no tiene, teniendo en consideración que los periodistas son libres de informar, Gregoria Zapata reconoció que pidió que no hagan mal uso de las fotografías tomadas. Asimismo, indicó que intercedió ante el chofer de una camioneta municipal para que transporte a personal ajeno a la institución que no sería más que personas llevadas en cada acto público para avivar al alcalde Bardales.

En una radio local Zapata Gallegos, ufanándose de su calidad de docente universitaria, amenazó por segunda vez a los periodistas, esta vez de denunciarlos al Poder Judicial y entre barbarismos expresó haber sido "testiga" en lugar de testigo que es el concepto correcto.

El asunto que exasperó a los seguidores del alcalde sullanero, se produjo cuando vecinos del sector de Loma de Teodomiro, gritaron improperios a Jaime Bardales Ruiz, gritos que fueron escuchados por los presentes y que no se dieron por motivación alguna, sino por espontánea decisión de los lugareños.

Agresiones por parte de gente vinculada a la Municipalidad no son nuevas, existen reiteradas denuncias en ese sentido, y quizá la más grave fue aquella que enfrentó al jefe de Imagen Institucional y un periodista local.

En tanto, los periodistas que denunciaron el hecho, expresaron sentirse tranquilos y que seguirán informando con veracidad, pese a los actos hostiles que siempre encuentran para el cumplimiento de su deber de informar en la ciudad de Sullana.